2008. Sistema de parque urbano, Murcia, España.
GANADOR CONCURSO URBANO
Sistema de parque urbano. Alcantarilla. Murcia (2008)
¿Qué mejor máquina de transporte para una ciudad que una bicicleta?
El gran vacío urbano que surge de liberar el espacio invadido por las vías de tren se enlaza con el recuperado y frondoso bosque de ribera del río Segura, para crear así un recorrido tan variado y rico como saludable. Espacio urbano y espacio natural unidos por un hilo de carril bici. En uno, un pavimento continuo salpicado de pequeños parques, en otro, un suelo rico en nutrientes y lleno de vida salvaje. Una ciudad ideal que podría ser real. Y dentro de esas dos bolsas los equipamientos que convengan: una heladería a la salida del colegio, una auditorio inmerso bajo un bosque de Olmos de Ribera, unos cuantos puestos del mercado de los viernes junto a la calle comercial o un centro deportivo animado por las acrobacias imposibles de los Mitos.
Parque Urbano
Frente a la idea de recuperar el parque de ribera original, creando un parque pintoresco y bucólico donde la vegetación autóctona es la principal protagonista, el área del Parque Lineal se resuelve teniendo en cuenta el carácter urbano que éste tiene por su relación tan directa con la ciudad. Un gran vacío urbano se reinterpreta y se ocupa por los usos que los vecinos necesitan para una relación y convivencia satisfactoria: deporte, juegos educación, cultura y comercio se mezclan dando sentido a un espacio antes vacío.
Recorrido tráfico rodado
El perímetro de la actuación se acondiciona para la circulación de vehículos. Las calles que actualmente acaban en cul de sac estarán atadas por un recorrido que permitirá una mayor fluidez del tráfico, el acceso a los equipamientos, el reparto de mercancías, etc. Apoyando este recorrido se proyectan bolsas de aparcamiento al exterior que resuelvan el aparcamiento tanto de las viviendas vecinas como de los visitantes de los equipamientos.
Accesibilidad
Se resuelve toda la intervención del parque líneal con hormigón vertido in situ. Esta lámina dura se extenderá adaptándose suavemente a la topografía existente creando recorridos alternativos cuyas superficies no superen pendientes del 6%. El acceso a cualquier punto del parque y sus equipamientos, incluso sobre ruedas, será cómodo para toda persona.
El recorrido peatonal y ciclista se desdobla en dos líneas paralelas para el área del Bosque de Ribera. Una de hormigón y otra de zahorra permitirá que el ciclista y el peatón elijan que superficie se adapta mejor a sus deseos para recorrerlo.